¿Cuáles medidas ayudarían mejor a los obesos a seguir su dieta para perder peso?


Para que un plan alimentario de reducción de peso corporal sea exitoso, no basta simplemente con comer menos; se requiere tomar en cuenta una serie de medidas complementarias importantes:


1.- Evitar las dietas muy estrictas y formularse una meta alcanzable. Las dietas muy estrictas son aberrantes, estresantes, difíciles de seguir y no promueven cambios en la alimentación. No es saludable omitir alguna de las comidas, por el riesgo de deficiencias nutricionales; y, además, causa hambre, ansiedad, irritabilidad y cambio de humor, por la falta de glucosa para el cerebro.  También causan deshidratación, aumento del ácido úrico, descalcificación ósea y mayor riesgo de cálculos renales. Es bien sabido que cuando se pierde rápido de peso, se pierde tanto grasa, como agua y masa muscular; y el peso perdido se recupera muy pronto (¡y con intereses!), ya que el músculo es un tejido metabólicamente muy activo. Se recomienda perder 1-2 libras a la semana, reduciendo el tamaño de las porciones de los alimentos consumidos, y realizando alguna actividad física regular. Siempre se debe incluir en cada comida, alimentos proteicos (lácteos, aves, pescados, huevos, soya y nueces), energéticos (granos integrales, leguminosas, tubérculos, pastas, galletas, panes y cereales; junto con aceite de oliva, canola y aguacate) y reguladores (frutas y verduras frescas).

2.- Elaborar un plan de alimentación saludable para todos. El cambio en la alimentación sería más fácil y perdurable si se involucrara a todos los miembros de la familia; y no, cuando el obeso lleva una dieta diferente.

3.- No ver televisión mientras se está comiendo. La alimentación debe ser un acto consciente; y debe evitarse cualquier distracción que nos haga comer más, o ingerir algunos alimentos poco saludables, tales como: gaseosas, comidas rápidas, frituras y golosinas, promovidas en la televisión.

4.- Ir al supermercado con una lista de los alimentos del nuevo plan; no llevar niños ni ir con hambre, para evitar comprar dulces, bizcochos, maltas, gaseosas y otros alimentos hipercalóricos.


5.- Otras recomendaciones: comer en compañía de la familia, en un lugar y horario fijos; masticar bien los alimentos; tomar agua fresca; no saltar comidas y cenar temprano; pesarse 2 veces por semana; alejarse de todo alimento-tentación, y aprender a decir NO.

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