Lo que todo Diabético debe saber de su Hemoglobina Glicosilada

Dentro del control de la diabetes mellitus existen exámenes que debemos realizarnos cada cierto tiempo. La hemoglobina glicosilada es uno de ellos. Conocer de qué se trata es parte del ABC de la diabetes que todo paciente debe aprender.

En términos muy simples podemos decir que la hemoglobina glicosilada, HbA1c o simplemente A1c, es un examen que permite una visión en retrospectiva del control de la diabetes. Así como una glicemia capilar es una foto del momento, la A1c es la película de los últimos 3 meses aproximadamente.

Los glóbulos rojos que circulan en la sangre contienen una proteína llamada hemoglobina. La glucosa, que también circula en la sangre, tiene dentro de sus características el poder adherirse a la hemoglobina del glóbulo rojo y así se queda con él durante su promedio de vida, que es de más o menos 90 a 120 días.

Entonces lo que hace el examen de hemoglobina glicosilada es justamente medir la cantidad de glucosa adherida a los glóbulos rojos. El resultado se expresa en un porcentaje (%) que finalmente indica el nivel promedio de glicemias durante el trimestre anterior a la prueba.

Desde el 2010 la American Diabetes Association (ADA) incluyó los resultados de la A1c como otra forma para diagnosticar diabetes. Una A1c igual o mayor a 6.5% es oficialmente diabetes, mientras que una entre 5.7% y 6.4% es considerada prediabetes.

El DCCT (Diabetes Control and Complications Trial) y el UKPDS, que son estudios realizados en DMT1 Y DMT2 respectivamente,  demostraron que mantener la hemoglobina glicosilada en valores cercanos a los normales reduce significativamente la posibilidad de desarrollar complicaciones crónicas.

De todas formas hay que prestar mucha atención, pues como cualquier otro examen de sangre la hemoglobina glicosilada puede verse afectada por alteraciones que varíen el natural recambio de los glóbulos rojos tales como hemorragias, anemia hemolítica, transfusiones, embarazo y otras que producirían seguramente falsos descensos.

Y también, por otro lado, se puede ver alterada por la ingesta en dosis elevadas de ácido acetil salicílico (aspirina), vitamina C, alcohol y altas cifras de lípidos en sangre entre los más comunes, que producirían falsos aumentos.

Es importante recordar en pacientes pediátricos se suele recomendar que  no bajen del 8% de A1c, pues un resultado inferior los pone en riesgo de hipoglicemias severas con más frecuencia.

Recuerden hay que consultar con el médico diabetólogo para determinar cuál es la meta ideal para cada uno. Pues atención! no es igual la A1c de una persona con diabetes tipo 1 que la de una con diabetes tipo 2; lo mismo que la de un tipo 1 diagnosticado de adulto comparada con la de un tipo 1 adulto diagnosticado cuando niño.

La ADA recomienda la medición de la A1c al menos dos veces en el año y como preferencia 4 veces, o sea en forma trimestral.

Aquí les dejo una tabla de equivalencias para clarificar las cifras.



¿Cómo se realiza la prueba?

Es una prueba sanguínea que puede ser realizada en un laboratorio, dentro de los exámenes de rutina. También existen equipos más portátiles en hospitales, clínicas y centros especializados, que con una muestra capilar entregan el resultado en 6 minutos. Simple, sencillo. No hay excusas para no saber cuál es tu A1c.



Dr. Johny Mendoza Véliz.
Diabetología y Nutrición.

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